La entidad que los nuclea exige formar parte de las excepciones a la cuarentena, como la posibilidad de circulación, de acceder a espacios comunes en edificios y la suspensión de los cortes de servicio, entre otros.
La Federación de Cámaras y Asociaciones de Administradores de Propiedad Horizontal de la República Argentina (FAPHRA) reclamó la inclusión de una serie de medidas que beneficien al sector y que no fueron contempladas por el gobierno nacional entre las excepciones al aislamiento social preventivo y obligatorio.
A través de una carta abierta dirigida al presidente Alberto Fernández, gobernadores y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, los consorcios de propietarios, club de campos y barrios cerrados mencionaron que la cuarentena obligatoria “trae aparejado un sin número de situaciones” que no están contempladas en el decreto presidencial.
En ese sentido enumeraron: “la imposibilidad de circular para quienes atienden las urgencias y el mantenimiento de ascensores, bombas de agua, etc. (en su mayoría cuentapropistas)” y la “dificultad para que los vecinos puedan abonar sus expensas” que constituye el “único ingreso genuino” de los consorcios, según aclararon.
Y agregaron que varias normas de convivencia se ven modificadas: la imposibilidad de acceder a espacios comunes como azoteas y salón de usos múltiples, entre otros.
“Es imprescindible que se mantenga, conforme las posibilidades económicas de estas sociedades llamadas ‘consorcios’, el mayor nivel de cumplimiento posible, pero sabemos que no será así en lo inmediato”, indicaron en el texto que lleva la firme del presidente de FAPHRA, Daniel Tocco, y de su secretario Ariel Coppari.
Es por esto que solicitaron a las autoridades que “se incluya a los sujetos sometidos a ‘propiedad horizontal’ dentro de las prórrogas de los vencimientos, la suspensión de los cortes de servicio y toda otra medida que favorezca a las PYMEs”.
“Tenemos dos realidades en relación a la recaudación de fondos: no hay un alto índice de vecinos no bancarizados, los cuales desean utilizar otros sistemas de recaudación que hoy no están abiertas al público, y muchos de los cheques con que se abonaron las expensas con anterioridad a la entrada en vigencia del DNU 297/2020 comienzan a ser devueltos”, explicaron.
“Ambas situaciones ocasionan un severo perjuicio financiero a cualquier entidad y los consocios no son la excepción”, completaron desde la FAPHRA.